María Tenorio Gallego

Mi vuelta a la normalidad.

¿Qué va a pasar? ¿voy a ser capaz de seguir el ritmo de mis compañeros en el colegio/instituto? ¿la gente que no me conoce, nos aceptarán desde el principio a mis secuelas y a mi?.

Tienes muchas ganas de ser independiente, de entrar y salir, de no dar cuentas a nadie como la gente de tu edad pero cuando te enfrentas a esa vuelta a la normalidad te das cuenta de que ni tú ni tus padres estais preparados para ello, que hay que hacerlo poco a poco porque no se puede salir de esa “burbuja” tan rápido y te haces preguntas diferentes… en mi caso, por tener secuelas físicas, di varias vueltas a la cabeza porque soy consciente de que en un futuro estas limitaciones físicas se acentuaran y “no debía” , por ejemplo, elegir una carrera en la que el trabajo físico fuera su principal característica.

¿Las revisiones? Estas deseando de que se espacien en el tiempo, de hacértelas una vez al año e incluso de no volver a tener que pincharte, pero por otro lado “necesitas” de vez en cuando afirmar que todo sigue bien, porque el miedo de la mayoría de los pacientes que supera un cáncer es el volver a recaer. Yo me hago una revisión anual y aunque estoy convencida siempre de que todo va a salir bien, los dos-tres días que estoy esperando los resultados son días en los que inconscientemente estoy un poco irascible e incluso cabreada pero cuando te dan el O.K. de esas pruebas, el suspiro de alivio que doy y la sonrisa que se me dibuja en la cara hacen que olvide esos días, aunque no deja de ser cierto que si tengo algún dolor o molestia “rara” que dure más de lo previsto empiece a tener esos pensamientos negativos.

Maduramos más rápidamente que nuestros iguales y personalmente (aunque a nuestros padres les de un poco de “pena”) eso nos hace disfrutar mucho más del momento en el que vivimos y de las oportunidades que se nos presentan, ya sea el tomar un café con nuestros amigos o el compartir un rato de biblioteca con los compañeros de clase, por no hablar de las reuniones familiares o simplemente del día a día.

El cáncer nos ayuda a definir prioridades y para mi, la principal es ser FELIZ con lo que tengo dia a dia e ir superando retos a corto plazo, por ejemplo, mi reto actual es estar dos horas de clase de baile a la semana y no acabar con las piernas destrozadas ( de momento llevo una hora y media y en un mesecito espero llegar a esas dos horas).

 

Maria